El director de Bosco, el jardín de los sueños, José Luis López-Linares, repite fórmula acercándose a Goya en esta ocasión. El documentalista español se ha rodeado de un nuevo equipo de expertos, doce especialistas de todas las disciplinas para intentar descifrar la abundante y sinuosa obra del pintor español. A la cabeza de este cortejo, el difunto Jean-Claude Carrière, guía erudito y narrador apasionado de un documental cautivador. Cada uno de ellos arroja luz a su manera sobre un artista de tan increíble riqueza. Por ejemplo, un otorrinolaringólogo se divierte encontrando las consecuencias de la sordera del pintor en sus cuadros. Más que un montaje cronológico, la película salta de un periodo o de un cuadro a otro. Pero la conexión está asegurada por nuestro distinguido guía, Jean-Claude Carrière amigo y valioso colaborador de Luis Buñuel. El documental teje vínculos artísticos entre el pintor y el director de Un chien andalou, teniendo ambos en común el ser aragoneses, sordos, y el gusto por el surrealismo.